17 junio, 2015
Mi Primera Cita
Era al final de la noche y las calles en mi ciudad estaban tranquillas. Era un sábado y estaba relajando en mi silla favorito; grande, roja, y tan cómoda. Acababa de regresar a casa después de mi primera cita con Pedro, el chico que sintió al lado de yo en la banda de nuestro colegio. Cada día en la clase de la banda, Pedro me molestaba porque era inútil con el clarinete—siempre me sentía avergonzada, pero a mi me gustaba la atención. Cada persona en la banda sabía que Pedro y yo teníamos una relación especial.
La cita fue perfecta. Pedro tenía dos años más que yo y tenía un coche, así que me recogió a las siete. Todavía puedo recordar la ropa que llevaba puesto esa noche—unos vaqueros, las botas del piel, un suéter rojo, y pendientes plata. Fuimos a ver una película de Clint Eastwood—era horrible para una cita, pero a nosotros no nos importaba; en vez de escuchar de la película, estaba pensando sobre lo que Pedro estaba pensando. Él me volvió loca, literalmente. Después de la película, Pedro me llevó a cenar. Estaba tan emocionada; no podía comer. Hablábamos de todo—de nuestros amigos, nuestros familias, nuestros clases, y nuestros chistes especiales. Esperaba que la noche nunca terminaría. Al final, cuando Pedro me dejó a mi casa, me dio un beso pequeño en mi mejilla.
Posted by Anónimo a las 11:14 p. m. // // //
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