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Big Day


Carlos se despertó y vio la fecha en el calendario: el 24 de Mayo, el día de la boda de Lucía. Se le cayó el alma a los pies. Le pareció que había perdido su oportunidad de confesar su amor a la chica de sus sueños. Él ha estado enamorado de Lucía desde el día que la conocí pero nunca ha tenido el coraje a decírsela.

No sabía que debería hacer porque si no hiciera nada, viviría con arrepientas grandísimas. De repente, decidió ir a la boda para confesar su amor a Luisa. No tuvo otra opción. Compró un traje elegante, robó un coche, y empezó a conducir sin pensar de lo que estaba haciendo. «Es mi única opción», se decía a si mismo miles de veces. El coche se alejó a toda velocidad y él estaba sudando nerviosamente. Tenía muchísima prisa porque no podía llegar tarde al día más importante de su vida.

Al mismo tiempo, Lucía estaba arreglándose y vistiéndose en su vestido de novia. Estaba muy nerviosa y tenía una duda pequeñita en su corazón. «Es normal tener arrepentidos antes de la boda», se decía a sí mismo, tratando de convencerse que no había ningún problema. Sin pensar, andaba por la nave lateral y trató de olvidar sus pensamientos negativos. Por fin, el sacerdote dijo las palabras desalentadoras: «Habla ahora o para siempre tu paz». De repente, las puertas abrieron y Lucía giró la cabeza hacia la puerta y vio a Carlos. Los dos miraron los ojos y ya sabían lo que debían hacer. No necesitaron palabras para expresar los sentamientos entre ellos. Lucía no pudo creerlo, toda se hizo claro y empezó a correr hacia las puertas sin ninguna duda.

Posted by Shannon a las 1:12 p. m. // // //  

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